domingo, 29 de julio de 2012

El Tren Del Infierno

 
  Unos delincuentes tras un tiroteo con la policía consiguen escapar en un tren subterráneo. Pronto descubren que la infernal máquina no se detiene en las estaciones que pasan y cada vez acelera más su marcha hacia un destino desconocido…

  Cuenta la leyenda que dos atracadores fueron cercados por la Policía y, en su huída, tuvieron que abandonar su vehículo de fuga y adentrarse en una estación de metro. En su desesperada carrera, comenzó un tiroteo en los pasillos de la estación, en el cual un certero disparo de uno de los ladrones impactó directamente en la frente de uno de los policías, matándolo al instante.
  En mitad de la confusión, y mientras el resto de agentes se parapetaban tras unas columnas, la pareja de delincuentes consiguió subirse a un tren mientras escuchaban a su espalda la detonación de más disparos de los policías. Pocos instantes después la máquina emprendió su marcha, escapando dentro de ella los ladrones.
  Era de noche y el vagón estaba prácticamente vacío, sólo había dos personas más en el tren que acababan de abordar. Un mugriento mendigo encapuchado que parecía inconsciente por su borrachera, aunque no soltaba una bolsa de papel con la cual protegía una botella de licor. Y un hombre con aspecto de abogado que, perfectamente trajeado, dormía con la boca abierta y muy probablemente se habría pasado de estación hacía bastante tiempo. Los atracadores, al comprobar que no estaban en peligro, empezaron a reír su suerte y a trazar un plan de fuga:

  “Probablemente en la puerta de la próxima estación nos esté esperando la mitad de la Policía de la ciudad; así que, en cuanto bajemos de este trasto, tenemos que meternos corriendo en el túnel. Dentro ya buscaremos cómo escondernos o escapar” –dijo el que parecía más inteligente de ambos; el otro, asintió mientras vigilaba al resto de pasajeros.

  La estación se acercaba y, asustados por la posibilidad de que un grupo de agentes armados les esperaran en el andén, se agazaparon bajo los asientos: de ese modo, los asientos servirían de parapeto en caso de comenzar de nuevo un tiroteo. Pero, para su sorpresa, el tren no solamente no se detuvo en la estación sino que además aumentó su velocidad de marcha.

  “Estos estúpidos nos están tendiendo una trampa, seguro que nos quieren llevar a un lugar que ya   tengan controlado para evitar que muera alguien más en la estación. Seguro que han dado la orden al maquinista para que no se detenga”

  Visiblemente asustados, comenzaron a caminar como locos por el interior del tren mientras buscaban un modo de escapar; pero las puertas parecían selladas e incluso, disparando a la manilla que les permitía cambiar de vagón, no consiguieron su propósito.
  Una nueva estación pasó ante sus ojos a toda velocidad, pero esta vez se dieron cuenta de un detalle que en la anterior ocasión no detectaron. La gente que había en el andén esperando no parecía inmutarse, como si no pudieran ver la potente máquina que cruzaba a toda velocidad por la vía.
  El tren aumentaba su velocidad con cada metro recorrido y parecía adentrarse en las entrañas de la tierra. Pues cada vez se podía percibir con más claridad la inclinación del vagón y su vertiginoso descenso.

  “¿Qué pasa aquí? Esto no lo está haciendo ningún policía” – dijo el más callado.

  De repente la luz del tren comenzó a parpadear y tras cada momento de oscuridad el vagón parecía distorsionarse y volverse cada vez más tétrico. Una especie de material viscoso similar a la sangre comenzó a brotar de la paredes, los asientos que antes parecían nuevos envejecieron de golpe y se mostraban oxidados y con el plástico derretido. Era como si hubieran sido expuestos a altas temperaturas o alguien se hubiera dedicado a quemarlos con una llama.
  Aterrorizados e incapaces de articular palabra, vieron como una nueva estación se acercaba, pero esta vez no encontraron un andén a su paso. En su lugar había una especie de cámara de tortura en la que despellejaban vivo a un desdichado que gritaba de dolor mientras lloraba sangre. Las cámaras se sucedían una por una y la velocidad del tren se había aminorado, como para “deleitar” a sus pasajeros con las más crueles y brutales formas de torturar y causar dolor, que cada vez eran más sádicas y salvajes.
  De repente el tren se detuvo y el mendigo, que hasta el momento parecía inconsciente a causa de su borrachera, se levantó. Los atracadores se quedaron petrificados al observar bajo su capucha unos brillantes ojos amarillos y un rostro rojo adornado por una puntiaguda barba.

  “Tú te bajas aquí, estafador: –dijo mientras levantaba con un solo brazo al hombre trajeado y lo lanzaba fuera del vagón.

  Inmediatamente un par de sombras que aparecieron del suelo le levantaron y llevaron hasta un foso lleno de gusanos. El estafador comenzó a gritar mientras los gusanos le atravesaban la piel y comenzaban a devorarle por dentro.
  “Estos gusanos te devorarán en vida, como tú lo hiciste al lucrarte como un parásito del trabajo y el dinero de los demás para llevar una vida de lujos- dijo el falso mendigo que al que ya fácilmente se podía distinguir como un demonio. –Ustedes no tendrán tanta suerte, Ustedes van mucho más abajo”
  Al día siguiente las crónicas de todos los periódicos anunciaron la muerte de un policía y dos atracadores que fueron abatidos a pocos metros del tren en el que pretendían escapar.

  NOTA: El relato anterior no es en sí una leyenda urbana, sino más bien un cuento que dramatiza del temor que sienten muchas personas al adentrarse en la tierra. Son muchas las leyendas de personas que avanzando por el interior de una cueva y corren una suerte similar a la de los protagonistas de esta historia, desapareciendo en sus profundidades. Y es que el hombre por naturaleza se siente incómodo cuando sabe que se encuentra enterrado varios metros y con toneladas de tierra sobre su cabeza. Así mismo los trenes suburbanos (el metro) parecen una mina inagotable de mitos y leyendas contemporáneas donde los protagonistas reciben un justo castigo por sus culpas o errores. 






Los Sátiros, "Criaturas Fiesteras"


  Los sátiros son criaturas masculinas, son una invención posterior de los poetas en que la mitología griega acompañaba a Pan y Dioniso, vagando por bosques y montañas. En la mitología están a menudo relacionados con el apetito sexual.
   Se les representa de varias formas; la más común (y básicamente romana) es la de una criatura mitad hombre mitad carnero, con orejas puntiagudas y cuernos en la cabeza, abundante cabellera, una nariz chata, cola de cabra y un priapismo permanente. A menudo llevan pieles de animales, de pantera (atributo de, por ejemplo, Dioniso).Las representaciones romanas confundían a los sátiros con los faunos, quienes solían tener piernas de chivo. La confusión ha perdurado incluso en obras de arte contemporáneas, como el «fauno danzante» de Lequesne, que es más bien un sátiro.
  Se les ha representado en varias edades de su vida. Los menores son llamados satyrisci, y se los representa como graciosos jóvenes: el sátiro Anapauomenos (en descanso), atribuido a Praxíteles, es el mejor ejemplo. Los sátiros mayores son llamados silenos, por Sileno, preceptor de Dioniso, y se les representa como de una gran fealdad. Aparecen a menudo con una copa o un tirso en la mano, en actitud de bailar con las ninfas, a las que a menudo persiguen.
  Los sátiros son criaturas alegres y pícaras, aunque su carácter desenfadado y festivo puede volverse peligroso e incluso violento. Como criaturas dionisíacas, son amantes del vino, las mujeres y disfrutan de los placeres físicos. Bailan al son de las flautas, címbalos, castañuelas y gaitas. Tienen un baile especial llamado sikinnis. Debido a su gusto por el vino, a menudo aparecen sosteniendo copas y aparecen en la decoración de vasijas y vinajeras.


sábado, 28 de julio de 2012

Las Ninfas, Guardianas de la naturaleza

 
  Estas son seres fantásticos y principales ya que tienen dominio en toda la naturaleza.
Bellas, muy Hermosas, con cabellos largos y cuerpos preciosos. Las ninfas se reflejan en la mitología clásica como seres subalternos que llenaban el universo.
  Las ninfas viven en montañas y arboledas, al lado de fuentes y los ríos, pero también en árboles, valles y grutas. Se las asocia con frecuencia a las divinidades superiores: en especial a la cazadora Artemisa, al profético Apolo, al juerguista dios del vino Dionisio o a dioses rústicos como Pan y Hermes.
  El tópico de la unión simbólica entre una ninfa y un patriarca –a menudo personaje epónimo de un pueblo– se repite sin fin en los mitos griegos sobre la fundación de ciudades; la función de esta unión era otorgar autoridad y reconocimiento al linaje del rey y de su descendencia.
  La idea de que los ríos son dioses y de que las fuentes son ninfas divinas está profundamente arraigada no sólo en la poesía antigua sino también en las creencias y rituales. Estas deidades están identificadas inseparablemente con lugares físicos y muchas veces se convierten en metáfora de las fuerzas emergentes de la Naturaleza y de la fluidez acuática.
  Sin embargo, otras interpretaciones sugieren que el vocablo ninfa es una variante de las voces del latín nubere y del alemán Knospe, por su raíz semántica que expresa la idea de evolución, crecimiento, apertura.
 

Clasificación de las Ninfas:
A continuación señalamos la clasificación habitual de las ninfas:
  Entre las ninfas de la Tierra (Epigeas) encontramos las Alseides (de las cañadas y arboledas), las Auloníades (ninfas de los pastos) y el gran grupo de Hespérides, ninfas del Ocaso e hijas de Atlas, subclasificadas en Aretusa, Eriteia, Héspera o Saraesa (a ninfa de la brisa o del viento hermoso), entre otras. Podemos citar también, entre las ninfas terrestres, a Limónides (que representa a los prados), a Minte (menta), Napeas (valles, montañas y cañadas) así como a Oréades, ninfa de las grutas.
  Luego, entre las ninfas de la Madera, encontramos a las famosas Dríades (ninfas de los árboles) a su vez clasificadas en Hamadríades (ninfas de los robles), Melíades (ninfas del manzano), Leuces (ninfas de los álamos blancos), entre otras. Las margaritas son las flores favoritas de las ninfas de la madera.
  Con respecto a las ninfas acuáticas –también conocidas como Efidríades– podemos mencionar a Maia (pareja de Zeus y madre de Hermes), a las náyades (generalmente ninfas del agua dulce), a Creneas (de las fuentes), Eleionomae (de los pantanos), Híades (de la lluvia), Limnades o Limnátides (de los lagos), Pegeas (de los ríos y manantiales), Nereidas –las hijas de Nereo, el Mar Mediterráneo– y, por último, las Oceánidas, hijas de Océano y Tetis, ninfas generalmente de aguas saladas.
  Finalmente nos queda mencionar otras ninfas conocidas como las Musas, las Lampadas (del Inframundo) o las Pléyades, hijas de Atlas y las constelaciones.


miércoles, 25 de julio de 2012

El Cancerbero, Guardian de los Infiernos

  En la mitologia griega Cerbero, del griego "Kerberos", demonio, era el perro de Hades, por eso se le llamaba: Can Cerbero. Era un perro de tres cabezas, anuque a veces se dijo que las cabezas eran 50 o hasta 100, y por cola tenia una serpiente. Tambien tenia innumerables cabezas y serpientes repartidas a todo a lo largo del lomo. Vomitaba torbellinos de fuego y su guarida estaba repleto de huesos humanos. Vigilaba la puerta de Hades, del inframundo y aseguraba que los muertos no salieran y que los vivos no pudieran entrar.
  Algunos pretenden que mato a Piritoo Cuando este bajo a Hades, junto con Teseo, para secuestrar a Persefone y Teseo fue cargado de cadenas. Otros dicen que Piritoo no estaba muerto y que ambos fueron liberados por Hercules en el trascurso de su ultimo trabajo, cuando este fue a capturar al Cancerbero. Hades encadeno a Teseo junto a una barca de madera, y sus piernas casi habian formado ya cuerpo con la madera del buque. Al atraparlo, Hercules tira de el con fuerza para sacarlo al exterior, parte de sus muslos quedaron adheridos a las tablas del barco. Este es el motivo por el cual los descendientes de Teseo tenian tan debiles las piernas.
  La existencia de un perro infernal en la entrada de los infiernos parece que ya estaba presente en la mitologia indoeuropea original, pues tambien aparece en la mitologia escandinava.
 
Hercules captura a Cerbero:

  Fue el ultimo de los doce trabajos de Hercules. Primero para poder entrar al infierno sin peligro, Hercules hubo de iniciarse en los misterios de Eleusis, de paso tambien pudo perdonarse a si mismo por haber matado a sus propios hijos.
  Encontro la entrada del inframundo en Tanaerum. En algunas versiones distintas, a Hercules le basto simplemente con pedir permiso a Hades que ordeno a Cerbero que lo dejara pasar.
  Junto con Orfeo, Hercules fue el unico mortal que entro en el infierno a pesar de la guardia de Cerbero. Unos dicen que Hercules le lanzo una torta de trigo, miel e Hierbas somniferas, una vez que el perro se durmio, lo encadeno y asi pudo sacarlo al exterior. Otros dicen que logro encadenarlo con una lucha barbara y tremenda en la que por fin pudo ganar el heroe tras herirlo con una de sus flechas. Finalmente, hay quien dice que el Cerbero simplemente obedecio a Hercules porque fue el unico que por primera vez le hablo sin temor,con simpatia y cariño, ante lo cual el Cancerbero no pudo resistir la dulzura de sus palabras y fue como un cachorrito a lamerle las manos.


"El perrito Hulk"


  El cachorro, una hembra, de la raza labrador, nació el 30 de noviembre del 2009 en la localidad de Mairinque, a 65 kilómetros de Sao Paulo, el dueño del perro le puso de nombre “Hulk”, en honor al superhéroe de dibujos animados, que se caracteriza por su color verde intenso.

  A diferencia del dibujo animado, la pigmentación del pelaje del cachorro era de tono de verde claro, con una manchita de un verde un poco más oscuro en la frete de este perrito.

  El motivo que encontraron los veterinarios para explicar la rareza fue la exposición del perro, durante la gestación, a una sustancia llamada biliverdina, que se puede encontrar en la placenta.

  Al nacer, “Hulk” era el único de los nueve cachorros de la manada con el pelo verde, aunque dos semanas después ya ha perdido el pigmento y ahora es blanca como sus hermanos.


jueves, 12 de julio de 2012

Hidra, la criatura legendaria griega

  En la mitología griega, la Hidra de Lerna era una criatura similar a una serpiente. Esta bestia acuática poseía numerosas cabezas –diversos poetas afirman que tenía tantas cabezas que tornaba imposible la tarea de cualquier pintor que quisiera retratarla–. Además, contaba con una respiración venenosa que la hacía aun más peligrosa.
  La Hidra de Lerna fue aniquilada por Hércules durante uno de sus doce trabajos. Su guarida era el lago homónimo, situado en el Argolid. Aunque se especuló que tal sitio habría existido en la Antigüedad Clásica, la arqueología ha desmentido el mito de que este sitio sagrado era incluso más antiguo que la ciudad de Mecenas, en Argos.  
 Cuenta la leyenda que debajo de las aguas de Argolid existía una entrada al mundo subterráneo, y que la Hidra era su guardiana. Este animal fabuloso descendía de Tifón, Equidna y –según Hesíodo, en su Teogoníade la Diosa de la Tierra, Gea. Se decía que la Hidra era hermana de Quimera y del Cancerbero.


  Al llegar al pantano cerca del lago Lerna, sitio donde moraba la Hidra, Hércules cubrió su boca y su nariz con un paño –para protegerse de los humos venenosos–  y tiró flechas de fuego para sacar a la bestia de su madriguera. La enfrentó con hoz en mano y la mató, tal como figura en algunas pinturas arcaicas.
  Se ha precisado que esta criatura se veía favorecida por una reacción biológica: cada vez que una de sus cabezas era cortada, surgían dos más en su lugar. Esta cualidad era la expresión más acabada de la desesperación que generaba en cualquiera de sus adversarios, aunque no en Hércules.
  Los detalles del enfrentamiento fueron narrados por Apolodoro. Cuando Hércules se convenció de que no podría derrotar a la Hidra valiéndose de métodos convencionales, pidió ayuda a su sobrino. Éste le propuso la idea –probablemente inspirada por Palas Atenea– de utilizar trapos ardientes para quemar los cuellos decapitados después de cada cercenamiento. Entonces Hércules se dedicó a cortar cada una de las cabezas de la Hidra mientras su sobrino quemaba los cuellos degollados y sangrantes.
  Así, Hércules se enfrentó a la última cabeza, la principal e “inmortal” cabeza de la Hidra, aplastándola debajo de una gran roca que existía en el camino sagrado situado entre Lerna y Elea. Sumergiendo sus flechas en la sangre venenosa de la Hidra, completó su segunda tarea.
  Una continuación de la leyenda indica que luego de cortar cada una de las cabezas de la Hidra, Hércules bañó su espada en la sangre ponzoñosa y después quemó las cabezas caídas para que no pudiesen volver a crecer.

martes, 10 de julio de 2012

La Historia del Muelle de Sanblas

 
  Esta es la “Leyenda de Nayarit”, se cuenta que en el muelle de San Blas una anciana camina en la playa por las noches con un vestido viejo de novia con los cabellos sueltos llorando sin parar. La gente que la ha visto, se mira tan real que la quieren ayudar, y ella sigue caminando sobre las aguas del mar y desaparece.
Se dice que una muchacha se enamoró de un hombre pobre, esa relación, las dos familias lo llevaban a gusto, solo que el joven decidió irse de la ciudad, para ganar un poco mas de dinero para reunir para la boda.
  Le hizo prometer a la novia que lo esperaría; él iba a viajar en barco, ella lo fue a despedir y no se quito de la playa hasta que desapareció en el horizonte el buque. Ella sentía un mal presentimiento, sin faltar un solo día acudía al muelle para esperar el regreso de su novio, ella se vestía igual como cuando lo fue a despedir, para que el no fuera a confundirse y así sin perder el tiempo irían a casarse.
  Cuando llegaba un barco miraba ansiosa a todos los que descendían sin ver a su amado. Pasaron los años y ella seguía aferrada con el novio, un día pasó un amigo de su novio y le dijo que tan pronto que se fue a la otra ciudad se enamoro y se casó con una joven y tuvo con ella hijos, pero por cuestiones de trabajo él se embarcó y este se hundió en el mar, jamás apareció el cadáver, la joven en lugar de entristecerle se molestó, le dijo -que era mentira-que ella lo esperaría.
  Con los años los pobladores la consideraban una loca y siempre con el mismo vestido no concebían como una  mujer esperara por tanto tiempo a un hombre que nunca regresaría.
Muchas personas querían llevarla al manicomio, pero ella lloraba y suplicaba que tenía que permanecer en el muelle, que su novio regresará por ella, los habitantes la dejaban ahí en el muelle.
Cuando pasaban junto a ella, inspiraba temor porque había perdido la razón, la vejez la alcanzó pasó 50 años pasó a cabellos grises, fiel a su sitio sonriendo cuando veía un barco llegar. Un día una tempestad ella camino al mar las olas crecieron llevándosela, el mar la regresó ya sin vida, los pobladores se encargaron de su funeral.
  Hasta la fecha se cuenta que aparece una anciana en el muelle que camina y sigue caminando sobre las olas  del mar, se escuchan  sus lamentos.

 

  La cancion de Mana llamada: "el muelle de Sanblas", nos relata de la verdadera historia de Nayarit, asi que cuando escuchen esa cancion, practicamente estan escuchando la historia, pero en una version un poco mas ritmica.